jueves, 25 de junio de 2009


Y me acordé cuando ví esta foto el dia que me decías que estaba llena de algas en las piernas, de peces en la panza. Soñe muchas cosas y aplaste todo lo que vino de a montones, si, obviamente te quise como quise alguna vez un pájaro, como quise mis lápices en 2do grado del colegio juan mantovani. Nunca te conté que usé guardapolvo (obviamente este era heredado de mi hermano, en su momento la ropa se heredaba mucho..), asi como tampoco te conté que hacia tiempo había dejado de quererte, a eso talvez también lo haya heredado de algun lado, que no se cual será de todos mis lados. Te leí un cuento que no vas a recordar, te presté 62/ modelo para armar (quien sabe que quería mostrarte) libro que nunca vas a leer, vendiste todo lo que di, compraste cosas tuyas, aplaste todo lo que vino, lo sé, lo aplaste como para hacerlo papel reciclado. "¿Y la memoria se puede reciclar?" te pregunto ahora yo a vos. Y sé que no vas a contestar, porque prefiero tu silencio a todas las palabras amontonadas en tu boca. Talvez llegue alguna vez entre tanto recuerdo (o no recuerdo, porque sé muy bien como hacer de cuenta que me olvidé de todo) a contestarme alguna pregunta que me has hecho preguntarme. No supe nunca como describir exactamente lo de las algas y lo de los peces, senti coletazos, senti burbuja, fui el mar salado, el agua corriente, la ida y la vuelta, el entierro. Me diste la negación de las cosas, la no esperanza, y a su vez estuve tanto tiempo con la boca reblasada de tierra a la espera constante de.. de que? Del paradero de tu verdad, seguramente.

1 comentario:

  1. la verdad que me encantó...y yo digo, para qué reclicar la memoria, si va a ser del mismo material, peor entremezclado, de modo que no se puedan reconocer sus materiales? emjor tenerla y que sea útil, quedando intacta, para saber qué querés y que no .

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